La empresa sueca de moldeo por inyección altamente especializada Holmgrens Plast AB, de Gnosjö, equipó su parque de maquinaria en 2008 con la «serie Venus de Zhafir», totalmente eléctrica, y parece estar satisfecha con esta decisión. «Tenemos la Venus funcionando sin problemas desde hace unos meses. Nuestra decisión de compra, que se basó principalmente en la economía, para instalar una solución totalmente eléctrica con características de rendimiento y precisión comparables a nivel internacional y que se basaba en ingeniería germano-china a un precio de instalación significativamente más atractivo, ha demostrado su valor durante un tiempo», subraya el fundador y director ejecutivo de la empresa, Stefan Holmgren.
Con sus 45 empleados y unas ventas anuales de 100 millones de coronas suecas (unos 11 millones de euros), Holmgrens Plast ocupa una posición privilegiada en lo que respecta a las aplicaciones especiales, por ejemplo en el moldeo por inyección de 2 componentes, el etiquetado en molde o el procesado de poliuretano. La característica especial de la operación continua que funciona en tres turnos es la ampliación de las actividades empresariales centradas en el cliente, que abarcan toda una cadena de servicios desde la nave de fundición, pasando por el refinado y el montaje parcial, hasta el embalaje y el transporte. La lista de clientes incluye grandes grupos industriales como ABB, Volvo Penta y Volvo Construction Equipment o incluso Lascal, el fabricante de diseño de productos de transporte y seguridad de gama alta para niños.
La empresa se fundó en 1990 y se ha expandido constantemente desde entonces, siempre orientada a la producción progresiva utilizando un alto grado de automatización de alto nivel con la integración de tecnología de maquinaria altamente eficiente y, al mismo tiempo, compatible con el medio ambiente. En este contexto, Holmgrens se centra en el uso de máquinas de moldeo por inyección totalmente eléctricas: «Tras sopesar todos los criterios de eficiencia, ya en una fase temprana nos resultó obvio que las máquinas totalmente eléctricas no sólo tienen mayor precisión, exactitud de repetición y tasas de producción, sino que también conservan recursos en todos nuestros intereses: Son más limpias, más silenciosas, más eficientes energéticamente y, para resumir estos criterios, en última instancia son incluso más rentables», así explica Stefan Holmgren su exclusiva filosofía empresarial.
Por tanto, Christer Sturesson, de la empresa sueca Zhafir, y el socio de ventas y marketing haitiano Plamako, también ven en el especialista Holmgren la confirmación de una tendencia sostenida, que para él también es cuantificable: «La evolución del mercado del moldeo por inyección autoriza a los responsables de Holmgren a orientarse hacia el ahorro de energía y los accionamientos totalmente eléctricos: Mientras tanto, la demanda de estas máquinas que funcionan sin aceite aumenta, sobre todo en el ámbito de la precisión, en vista del aumento de los costes energéticos en todo el mundo y de las normativas medioambientales y de seguridad laboral cada vez más estrictas. Nos complace enormemente que, con la máquina «Zhafir Venus» de alta tecnología y muy económica, mantengamos en nuestra cartera comercial un producto cualitativamente de gama alta y excepcionalmente competitivo.»
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